Mafias sin control
¿El gobierno Federal?




José Luís Loyo Ochoa
Agosto 02/06





Veracruz, Ver. Mx. Se quiera o no reconocer, es en éste sexenio cuando todas y cada una las células de las mafias se desatan, es ahora cuando desde todos los puntos del País surgen las guerras, tanto entre las mismas mafias como de ellas en contra de cualquier símbolo de la Ley, repetimos, es algo que no podemos ni debemos de dejar a un lado, pecando de insidiosos, podríamos observar que el gángster se alza al cobro de prebendas ofrecidas y no cumplidas.

Para poner un ejemplo lo más pueril posible, estamos como cuando el abonero le vende cualquier cosa a las amas de casa, y al pasar por el abono del artículo se encuentra con que la señora no tiene para pagar o sencillamente niega esa deuda contraída. ¿Pecamos de observadores?, quizá, pero no podemos pasar el hecho de que, es precisamente en éste sexenio cuando el problema mafias está en forma incontrolable, cuando surge ese cáncer en todo el País y, lo peor está en que esas células de las mafias se enfrentan tanto entre ellos mismos como en contra de todo lo que signifique LEY, (léase gobierno).

¿El ejemplo del abonero?, sencillo, la mafia, a nuestro personal juicio, le vendió algo a eso que significa Gobierno, LEY, en espera de alguna prebenda o simple y sencillamente algún espacio para poder realizar sus operaciones sin que sean perseguidos, al no obtener el pago de sus favores la ira monta en esos sujetos y salen a las puertas de quien o quienes les hicieron la compra de lo que ellos dieron sin recibo alguno. Siempre han existido las mafias, sin embargo nunca se habían enfrentado en contra del amo, es decir, de la LEY.

HOY, la mafia desafía a todo lo que signifique gobierno, sea del ámbito Federal, Estatal o municipal, ahora, o compran o amedrentan, o en el mejor de los casos arrasan con todo lo queda ser un obstáculo para el desarrollo de sus acciones, al día de hoy las mafias están en la posición de amos, de señores de la horca y del cuchillo, ya sacaron sus vitrinas y aparadores para exhibir sus mercancías al público consumidor cual comerciante que paga sus respectivos impuestos, ya es aquella mafia que se movía por los túneles de la oscuridad y las cloacas de toda la ciudad, ahora son comerciantes perfectamente establecidos como todos esos que pagan sus contribuciones correspondientes, y como tales, exigen espacio y libertad, ¿Triste realidad?, dígame usted si mira otra que no sea ésta.

Nuestra labor no es la de señalar sin prueba alguna, luego entonces las pruebas se ven en todo lo largo y ancho del territorio Nacional, sucede igual que con las mafias del pulpo camionero, les dieron rienda suelta y ahora no pueden pararlo salvo que con acciones para someterlos a los caminos de la legalidad se forme el caos entre la ciudadanía usuaria de sus armatostes y ataúdes rodantes.
Recordemos los dichos: en México, lo que no está prohibido está permitido, y si lo prohibido no pueden controlarlo, luego entonces algo está mal, algo no está funcionando como debería de ser o, en su defecto, alguien de muy arriba está en el juego de la protección subrepticia para que esas mafias de todos los que laboran en ella se expandan sin valla alguna, sin que nadie les impida el paso a todo el ámbito que ellos quieran acceder, así de sencillito, sin cortapisas ni los maquillajes propios de las carpas de circo o teatro.

Ahora el pueblo no sabe de quien defenderse, si de los buenos, de los malos o de los peores, el ciudadano común, ese que dedica su vida al trabajo honesto y ha velar por su familia no tiene el mínimo de garantías, no sabe cuando hijos o esposa podrán ser víctimas de esa mafias, él mismo, ese ciudadano no escapa al peligro de caer en esa redes. ¿Le causan estupor estas letras?, para nuestra desgracia es la realidad que vivimos en México, no somos alarmistas y menos pesimistas, es algo que se ve y vive diariamente, tenemos el ejemplo del D.F., en donde incluso hasta los legisladores ha sido víctimas de esa mafias que han sentado sus reales en esa ciudad Capital del País, y lo increíble, les han robado en el mismo recinto, en los estacionamientos del Palacio Legislativo de San Lázaro, que lo callen es por razones obvias, a ellos, los legisladores que les han robado ahí mismo le son repuestos sus bienes sustraídos ahí mismos para que no se levante el escándalo nacional.

Lógico es pensar que, quienes nos han informado de esos hechos dirán que no es cierto, dicho de otra forma, ha careo se desmientes, los motivos son obvios y saltan a la vista de todos, el prestigio del inmueble de la máxima tribuna del pueblo mexicano está en juego y entredicho ante tal divulgación.

En Veracruz no podíamos dejar pasar por alto el desenvolvimiento de las mafias y también tenemos de que preocuparnos, aunque las autoridades se empeñen en negarlo, los hechos saltan a la vista de todos. Hoy las Choapas es muy claro ejemplo de ello, pero no solamente en ese sureño lugar, y ahí está lo que nos debe de preocupar a todos los ciudadanos, quienes queremos vivir en armonía y en la paz de una vida social segura y salva para nuestras familias debemos de poner nuestro grano de arena para, en alguna forma, ayudar a la autoridades y en su defecto, desenmascarar a quienes caigan al corrupción de solapar y hasta de proteger a esa mafias que atentan en contra de nuestra integridad.
Si como ciudadanos comunes sabemos de autoridades corruptas que solapen y protejan a los mafiosos, debemos de alzar la voz en contra de esas acciones, si nos quedamos callados la suerte de nuestros hijos estará más que en peligro, y mientras usted piensa si pecamos de pesimistas o de alarmistas, recuerde que nuestros correos electrónicos están para tratar de servirle con muchos gusto:
loyocruceropolitico@yahoo.com.mx y loyocrucero@hotmail.com