¿Terminó la guerra?
¿Reparto del botín?

José Luís Loyo Ochoa
Julio 05/06

Veracruz, Ver. Mx. Igual al término de una guerra, viene ahora ese reparto del botín, situación donde no todos los guerreros están de acuerdo, y lo mismo que sucedía en aquellas batallas donde los bárbaros luchaban contra los pueblos de siglos pasados, ahora habrán de pelearse por ese reparto en donde los dos que quedan de pie aducen ser los ganadores de un botín que es el País.

Existe un organismo que es juez y parte, que constitucionalmente aceptado por todos los ámbitos del gobierno y de los partidos ejerce el papel de árbitro en las contiendas y los participantes, antes de iniciados los procesos de campañas, les aceptaron someterse a su laudo, luego entonces, ahora, cual si fueran personas adultas, lejos de adoptar poses de divas en decadencia, deben de someterse al resultado final que arrojan los números, que nunca la institución en la que ellos y el gobierno aceptaron de antemano, salvo que en verdad tuvieran pruebas de un manejo falto de probidad, pero pruebas que no permitan lugar a dudas.

Quien esto tan mal les escribe sabe de la corrupción que campea entre los del partido albiazul, al menos en lo que nos consta aquí en la zona que comprende los municipios de Veracruz y Boca del Río les hemos visto llegar sin más fortuna que una grandísima ambición de dinero y poder, en ese orden, pero también se está más que concientes que la corrupción en nuestro País es generalizada, que no existe en ningún partido político nadie que escape a ese cáncer que atenta y degenera a toda la ciudadanía mexicana, haciendo que en todo el resto de este globo terráqueo nos vean como si fuéramos extraterrestres, lamentablemente es una verdad que, aunque nos duela debemos de reconocerla.

Con toda seguridad, cuando haya pasado muy poco de tiempo con el gobierno de un Calderón (o quizá de un López), habremos de ir descubriendo cuantos de su grupo se empiezan ha enriquecer cual si fuera carrera de pista, que sin más descanso se embolsen todo el mundo billetes que pueda caberles en cuentas de cualquier banco y seguro que los habrá que hasta bajo el colchón empiecen ha hacer sus guardados para tratar de que nos los descubran, repetimos, es parte de nuestra idiosincrasia y solamente borrando del mapa a nuestra raza podrían desparecer corrupción y ambición.

Nadie que tenga un dedo de frente puede creer una sola de las mentiras que la clase partidista que estuvo en campañas esgrimía como argumentos para lograr que el ciudadano les diera el voto, ellos son los primeros en saber que todas las mentiras dichas iban encaminadas al embaucamiento ciudadano para lograr sus fines de erigirse y sentarse en esa ansiada silla presidencial.
Y expresamos en el espacio anterior que resultaba fuera de orden el que fueran cambiadas dos profesionistas que estaban de candidatos en el puerto por quien en estricto honor a la verdad no conoce ni el significado de la palabra legislador y sin embargo, así fue, el pueblo sucumbió ante unos pesos y promesas de uso regalos como láminas de cartón, despensas y abanicos, igual sucedió en Boca del Río, pero aunado a ello es necesario admitir que, al menos precisamente en los distritos que nos compete, de hace mucho tiempo ha dejado de existir unas dirigencias partidistas que en verdad puedan llamarse líderes.

Un auténtico líder partidista va en busca del militante, nunca se acomoda en su silla esperando que esa militancia acuda ha verle, quien en verdad es líder todo el año está al pendiente de sus agremiados, sale ha verles para saber cuales de sus múltiples necesidades pueden ser socorridas por su partido o al menos con que pueda ayudarle a ese militante, y al menos aquí en nuestra zona los líderes solamente van a las colonias en los tiempos del proselitismo, y así nunca habrá de granjearse la simpatía de ese elector, repetimos, ahora le toca al partido del revolucionario institucional hacer inconcienzudo análisis de quienes en verdad pueden seguir formando de la tropa y quienes pueden seguir siendo capitanes o generales, deben de hacer un relevo de mandos con el cerebro y no con ese corazón que ahora demuestran no haber puesto en la contienda.

Las mismas caras está demostrado que el pueblo, la ciudadanía en general ya nos la quiere, luego entonces que los viejos cuadros ejerzan el papel que deben de ejercer, que se conviertan en verdaderos maestros de las juventudes, de los que aún siguen creyendo en ese partido, están a tiempo de lograr recuperar un poco de lo que les queda, aquel voto firme ya es historia, hoy fue demostrado y comprobado, luego entonces querer volver ha repetir el mismo error será darle la última palada de tierra a ese partido.

En Veracruz puede estar el último Gobernador priísta en un Fidel Herrera, luego entonces deben de sopesar muy bien la situación para evitar en todo lo posible caer para no levantarse ya, Fidel Herrera ganó por mínimo de margen, quizá en el mañana ya ese margen no exista y entonces sí, en forma definitiva se pierda lo poco que podría haber quedado de un instituto político que pudo haber salido adelante por más tiempo.

Algo que nos mueve a reflexión es en el sentido de que, aún existiendo en todo el ámbito político la corrupción, con los priístas es diferente a los panistas.
Los primeros, cuando son gobierno, su corrupción permite que todos coman, en cambio con los segundos, los panistas, solamente los de su muy reducido grupo se enriquece, no permiten que ningún externo llegue a tratar de de hacer nada de negocios que no les dejen la ganancias principales a ellos, aplican, como les decimos aquí en México, la ley del embudo, lo ancho para ellos y lo angosto es para los otros, los que no forman parte de su clan, sencillito pero cierto, lo sabe el pueblo y sin embargo lo acepta, pero recuerde que nuestros correos estan para servirle: loyocruceropolitico@yahoo.com.mx y loyocrucero@hotmail.com