Sigue la mata dando
Más mezcla maestro

José Luís Loyo Ochoa
Junio 21/06

Veracruz, Ver. Mx. ¡Pueblo!, que amolados estamos, (por no decir jodidos) y es que en honor a la verdad, si en Países de los llamados desarrollados leen o ven las carretadas de estiércol que diariamente vienen saliendo de esas letrinas que en México llamamos partidos políticos, lógicamente con sus políticos dentro, las cosas no son para menos, la basura hiede por donde quiera usted exponer sus narices, y aunque trate de taparse las fosas nasales no podrá dejar percibir ese fétido hedor que de esos estercoleros emanan.

Y volvemos a los refranes populares; ¡Cuando el río suena es que agua lleva!, y no es para menos, si esos contendientes que hoy juran y perjuran querer servir al pueblo desde una curul tuvieran limpios sus historiales, jure usted que nadie podría irle sacando tantos trapos sucios al sol, y entre todos estos aspirantes lo que sobran por montones son precisamente esos trapos sucios, asquerosos por dondequiera usted verles, y si algo pueda faltar, aún quedan algunos días para el crucial día DOS DE JULIO, así que todavía podemos esperar que esos viejos lavaderos de vecindad se sigan atiborrando hasta el tope de toda la suciedad de esos “honestos y honrados” neo políticos.

Allá por los años cincuenta y principios de los sesenta existían en todo México el sistema de viviendas populares llamados patios de vecindad, donde lo mismo se podía ver morar en ellos al más humilde de los ciudadanos o algún empleadito de la burocracia, la única diferencia estaba en que los de medio pelo habitaban las accesorias que daban a la entrada de esos patios, hecho que hacía las veces de distinción social, los demás, los del populacho vivían en cuartuchos interiores que las más de las veces se componían solamente de un cuadrado de cuando mucho cinco cuatro metros por lado al que ellos agregaban un segundo nivel de madera que se llamaban tapancos, permitiendo gozar de un espacio más, pero el caso es que en esos patios de vecindad, todo el mundo sabía lo de todos los que ahí vivían, incluso lo que comerían en el día y las veces que iban al baño, y no era para menos, salvo los de la entrada, todos los demás solamente tenían un baño comunal y los lavaderos eran tanto pata trastes como para ropa.

El fondo de éste pequeño breviario histórico cultural viene a colación por todas las series de calzones flameados que les vienen saliendo a esos hoy aspirantes al sacrificio por el bienestar del pueblo, es decir, los candidatos a diputados y a senadores, llevando de la mano a los que quieren la silla más grande del País y que son, en última instancia, los más beneficiados junto con toda la bola de sus seguidores que ruegan porque sus candidato logre llegar a la grande, ya que si su gallo queda, ellos, los lambiscones, podrán asegurar su futuro de por vida.
Sin embargo, ¿de que sirve el saber todo el mundo de estiércol que priva en los que quieren ser los meros, meros?, al final de cuentas el pueblo habrá de darle el voto al menos indicado sin pensar en el gran perjuicio que habrá de hacerle a todo el resto de la ciudadanía. Se ha demostrado hasta la saciedad que los neo políticos salieron más corruptos que los otros, los de la vieja guardia política, los nuevos amos de México se han enriquecido en una sola administración mucho más de lo que lo otros se enriquecían durante las décadas que mantuvieron ese poder que hoy detentan los de la clase empresarial, se ha demostrado que esos ex empresarios metidos a políticos recurren a peores mañas que las que usaban los anteriores, constancia de ello existe en muchos municipios y otros centros al cual ellos entran con el poder omnímodo.

Hemos expuesto en éste mismo espacio como ellos, los neo políticos, tienen por norma contratar hasta los servicios de sujetos que se encargan de golpear a los que puedan significar un obstáculo para el logro de sus ambiciones, y amén de los golpes también hacen otro tipo de encargos más delicados que una simple andanada de golpes, luego entonces ésta clase de gente demuestra no detener su ambición ante nada ni ante nadie, y con ello ser capaces de cualquier acción sin importar el daño que puedan causar. Sabemos a lo que nos exponemos, sin embargo es parte de nuestro trabajo y nunca podríamos quedarnos callados, lo tenemos que exponer porque el ciudadano común ignora muchos de estos tipos de actos que se cometen al estilo de las mafias sicilianas de los años veinte en la ciudad de Chicago.

La política , la de los nuevos amos de México, ha cambiado en y por mucho a la política que ejercían los otros, los que dedicaban su vida a ese difícil arte que es la forma de gobernar, cierto que hubo sus épocas, pero los últimos treinta años o más de aquellos gobiernos las cosas se habían adecentado, el uso del garrote quedaba más que nada para el ramo del sindicalismo, donde hasta ésta fecha aún continua en operación con el liderazgo de algunos desquiciados que ni por asomo aceptan dejar los liderazgos de sus gremios.

Resumiendo, la famosa y trillada democracia a la mexicana la vamos ha pagar, sin duda, en la forma más cara de la que nos pudieran haberla vendido aquellos barbamos que vendían ropa y trastes en abonos, esos que semana a semana pasaban por los viejos patios de vecindad ha cobrar sus abonitos, y si la morosa estaba de buen ver, aceptaba su abono en especie, es decir, con el cuerpo de la dama deudora, solo había que cuidarse que el marido no se diera cuenta de la forma de pago, fuera de ahí, todo estaba de maravillas.
Y el estiércol podrá estar a flor de tierra, pero se quiera o no, es lo único que tenemos, por lo tanto tenemos que escoger de entre ese bello ramillete de muy espinosas flores, y cual hemos expresado en anteriores espacios, escoger quien de ellos ha sido el menos mentiroso, analizar cuidadosamente a aquel que haya dicho el mínimo de mentiras y a ese brindarle el voto, y mientras tanto nuestros correos siguen estando a sus apreciables ordenes tratando de servirle: loyocruceropolitico@yahoo.com.mx y loyocrucero@hotmail.com