Felicidades periodistas
El “pipo” y el pepito
Ni general ni coronel


José Luís Loyo Ochoa
Junio 06/08

Veracruz, Ver. MX. Antes que nada permítase a éste servidor externar con sinceridad de amigo una felicitación a todos los compañeros que, desde sus trincheras sortean todos y cada uno de los temporales que conllevan el riesgo de mantener informada al ciudadano de los sucesos que se dan en todos los niveles; sociales, deportivos, policíacos y político tanto a nivel municipal, estatal y federal.

No es un secreto y menos aún vituperio, pero nuestra entidad es cuna de grandes plumas que han destacado en todos los niveles, pero sobre todo, nuestros comunicadores se han destacado por ser de las plumas más honestas que existen en nuestro ámbito, y decir ello no es sencillo, sabemos de la corrupción que impera en todos los ámbitos de éste País, y exponer algo así nos puede regocijar cuando sabemos que, entre nuestros compañeros el que más o el que menos ha desdeñado oportunidades, aunque eso no incluya a todos, los hay que han sabido ponerse de alfombras para enriquecerse al lado de quien manda con el turno que le toque, no todo puede ser miel sobre hojuelas, incluso debe de existir esos tipejos que, más temprano que tarde se sabrá cuanto es lo que roban y han robado con el cargo que han recibido, repetimos, debe de haber de todo en la viña del señor.

Afortunadamente somos más los que hemos hecho de la información un apostolado que nos permite mirar de frente a cualquier persona, sea ciudadano o político, y esas son las cosas que nos llena de orgullo. A muchos de nosotros podrá tirarnos el hambre, pero el orgullo de nuestra pluma nos levanta para seguir en a brega diaria, diciendo sin medias tintas y sin tapujos aquello que los sucio de alma, corazón y mañas no quieren que sepa el vulgo, por nuestra labor sabemos muchas de las veces más de lo que en verdad deben interesar a quienes nos leen o escuchan, incluso para bienestar de nosotros mismos dado que muchas de las ocasiones ese saber pone en peligro tanto nuestra integridad como la de nuestras respectivas familias, pero inmersos en ésta labor exponemos esa seguridad con el único objetivo de sacar a la luz la verdad le duela a quien le duela.

Y para quienes como éste servidor nos desenvolvemos en los medios en forma empírica resulta todavía menos saludable el ejercicio de éste arte, pero llevando ya poco más de cuatro décadas y, sobre todo tratando de ser lo más objetivo y verás posible, no es dable el abandonar la pluma aún y cuando nos veamos amenazados por quienes en forma ruin y cobarde usan el anonimato para tratar de intimidarnos, es parte de nuestra vida y saben bien quienes nos tratan de coartar que nada conseguirán, no por que seamos valientes ni por que nos creamos invencibles, sencillamente estamos inmersos en nuestra labor y nos gusta lo que hacemos, lo disfrutamos y, lo más importante, el convertirnos en portavoz de un pueblo mudo nos hace sentir la satisfacción del deber cumplido.

Vaya entonces desde su espacio, con mucho cariño pero sobre todo con respeto, nuestra más sincera felicitación a todos los colegas, amigos, conocidos y compañeros, que éstas jornadas diarias sigan gratificantes en todo lo que nos genera, que sigamos siendo todo ese orgullo que representamos para nuestras respectivas familias. Felicidades colegas.
Panista adoc y sui géneris resulta el tristemente sujeto apodado el pipo, tipejo que le han sacado sus trapos al sol dejándolo no en paños menores sino encuerado en vía publica al ojo de todo el pueblo, pero que para él, esas exhibiciones han sido como aplausos que le avientan al carpero o al saltimbanqui callejero. Recordemos cuando el tío sub secretario del gobierno fidelista le sacó sus pedigüeñas actitudes al Gobierno de u Fidel Herrera, y en esos días la cantidad o no era para nada despreciable, hablamos de cien mil pesos del cuño actual, y el descarado individuo en su débil defensa trato de decir que esa cantidad de billetes los recibía para mantener sus oficinas del partido que representa, sujetos con esa cara dura son dirigentes partidistas y les pagan sus sinverguenzadas con curules de donde habrán de seguir sangrando la economía del pueblo.

Recordar que fue éste sujetito de marras quien pidió la intervención del gobernado para que le ayudara a controlar al líder de la bancada priísta en ese congreso del cual, para la desgracia de mi pueblo veracruzano forma parte, es por demás irrisorio, demostró que el carece de capacidad, por no decir de valores o de hombría para resolver los asuntos que en su puesto debe de saber resolver, pero ahora que el señor Gobernador se ofrece para ir a ese congreso en aras de exponer su punto de vista sobre el asunto del petróleo, ese sujeto se muestra tal cual es y se opone a esa visita del ejecutivo estatal, pero cuando se trate de pedirle prebendas al mandatario con toda seguridad olvidará sus actuales poses de imaduro o de desvergonzado. Y ese es el tipo de gentuza que deambula por ese que se autodenomina el partido de la pureza, y si el lector quiere ponerle limón por aquello de las caras amargas, no olvide también su salecita.

Harry Jakson Sosa, el pueblo veracruzano te extraña, y no es para menos, cuando fungió como director del estado el pulpo camionero tuvo que meter reversa y disciplinarse aún y con sus bravatas de siempre, todos los ataúdes rodantes que esos mafiosos camioneros llevaban cual discotecas ambulantes fueron quitadas sus estruendosas bocinas, bañados y afeitados esos primates mal llamados choferes del transporte urbano y la mortandad al por mayor que tenían esos émulos del diablo fue reducida casi a cero, la batalla estaba a favor del Estado con el Harry al frente de esa dependencia, tan Así fue que pugnaron en todo y con todo por que quitar de ese puesto al hoy extrañado por el ciudadano Harry.

Hoy tenemos a un general y un coronel, el primero dizque estatal y el otro por el puerto y municipio de Veracruz, pero de los dos no se hace uno, sencillito, ninguno de los dos sirve para el cometido al cual fueron asignados, pero ninguno de esos dos tiene un ápice de vergüenza para decirle al ejecutivo estatal que no pueden con el paquete, y mientras el pulpo camionero vuelve ha crecer en su fuerza destructiva afectando a ciudadanos del puerto que ninguna culpa tenemos de la incapacidad de ambos sujetos. Vergüenza debe de ser una palabra que no conocen éstos milites ni por asomo, si la conocieran ya deben de haber renunciado y pedirle perdón al ejecutivo por haberle engañado en la forma en que lo han hecho, ninguno de los dos señores puede con el paquete pero si cobran sus sueldazos como si en verdad estuvieran haciendo en bienestar del pueblo.

Que deje el coronel su flamante camioneta con clima artificial y se dedique ha vigilar el orden que falta en las principales calles del puerto, arterias en las cuales esos primates y sus amos forman hasta TRES CARRILES sin dar opción ni a peatones ni automovilistas a poder moverse por las calles. Por favor señor Gobernador, clemencia pide el pueblo, si no sirven que vengan otros antes de más desgracias. Y mientras esperamos que muevan a los que no queremos no olvide nuestros coreos electrónicos donde con gusto tratamos de servirles: loyocruceropolitico@yahoo.com.mx y loyocrucero@hotmail.com