Hasta la vista tocayo
Hoy nuevos millonarios

José Luís Loyo Ochoa
Julio 21/08

Veracruz, Ver. MX. Nuestro estimado amigo José Luís Enríquez González realizó obras perdurables, acciones y hechos que dejan una huella permanente en lo terreno, por ello a nuestro tocayo debemos de recordarle tal cual fue en éste camino transitorio que damos el nombre de vida, cuando en la realidad vida significa todo lo que el amigo dejó como siembra para que los que quedan puedan cosechar mejores frutos.

Le conocimos y tratamos como amigo, sabemos todo el camino que recorrió luchando a brazo partido por sacar adelante sus ideales y dejar sentadas las bases para que muchos de los que han creído en él hoy puedan aspirar a mejores condiciones laborales, hombre de convicciones fuertes y firmes que jamás permitió el que nadie le viera flaquear por el asomo de algún escollo en su camino. Yo, en lo personal, no le digo adiós al amigo sino un, allá nos veremos mi querido tocayo, en donde seguramente habrás de seguir tu lucha por alcanzar otros ideales, así y no de otra manera es como éste servidor recordará a su amigo y tocayo, a la familia, a los dos hijos con los cuales me une también una bonita y sincera amistad solo me resta expresarles que al luchador social que fue su padre no le gustará que le recuerden con dolor, todo lo contrario, ahora traten de ser merecedores de ese amor que siempre les prodigó y piensen que él no se ha ido, que perdurará por esas muchas labores que aquí realizó incansablemente.

Recuerden que estamos formados en la fila, que algún día habremos de volver ha vernos y, si allá se puede, habremos de saborear nuestro aromático café con canilla.

SIGAMOS AHORA con quienes aún estamos en éste laberinto que se mueve en política y que, dicho sea de paso, ya de viejos estamos comprobando que equivocamos nuestros caminos, en lugar de la pluma debimos de haber agarrado el arte de la mentira y falacia, de haberlo hecho así, estaríamos gozando de la comodidad que dan los billetes.

Enterarnos de todo los millones que está recibiendo el ex alcalde de Boca del Río nos da la pauta para ese pensamiento, le vimos llegar en la administración de Roberto Bueno al más puro estilo de empleado de una constructora, calzado del que usan en fabricas y sus camisas blancas que usaba cuando trabajaba para Alfonso Gutiérrez de Velasco, eternos pantalones de mezclilla que se distinguían por una marca de descocida a un lado de una de las bolsas y hoy, trece años después, amén de próspero ranchero, el señor también es muy próspero constructor, ah, y terrateniente, con edificios que valen una fortuna, pero todo ese billete ha sido producto de su “honesto y honrado” esfuerzo, no piensen mal y crean que esa fortuna es a costillas de los erarios del pueblo en su carácter de servidor del pueblo, para nada decimos algo así.

También, de paso, recordemos al hoy director del ISSSTE cuando llegó con Chirinos, el que nos dijeron que era veracruzano pero luego se descubrió su acta potosina, alquiló su humilde cuartito en una posada del centro de Jalapa y, al principio solamente le veíamos dos mudas de ropa, de esa color caqui y calzado de regular para abajo, sin embargo, con el pasar de la administración se cambiaron los papeles. Así le vimos al llegar, digo.
Estas cosas nadie nos las contó, las vimos con nuestros propios ojos y testigos todos los que estamos en la información y que nos tocó andar en aquella campaña, la de Chirinos, lo del chinaloense Ávila Estrada es algo que también muchos deben haberse fijado, crea usted que es por ello que hoy, con ya más de cuarenta años ejerciendo la pluma decimos que nos equivocamos, en lugar de pluma debimos de habernos transformado en caracol para hacernos políticos y hoy estaríamos en la opulencia, sin embargo ya nuestro tiempo pasó, ahora no nos queda más seguir dándole a la tecla para que el pueblo pueda tener la mejor claridad cuando llegue la hora de sufragar y sepa por quien hacerlo, al menos fije su vista en quien tenga la cola menos larga y las uñas menos sucias.

En relación al chinito, el que se dice boqueño, no el de: o coopelas o cuello, no extrañan para nada sus nuevas fortunas, supo, primero, se sumiso y obediente, y ya luego, poder en mano hacer valer ese poder que da la política, crea usted amable lector que no es para envidia, aunque no tengamos ni en que caernos muertos, vamos firme por éstos caminos sin tener que bajar la vista ante nadie, y ello, pese a quien le pese ya es ganancia, andar en camiones por no tener para ponerle gasolina al armatoste que llamamos auto no es en modo alguno pecado, cuando menos podemos ir jugando un boleto de melate esperando poder salir por buena vía de pobre, pero sin robarle al pueblo lo que debe de servir para brindarle mejores servicios a quienes más lo necesitan.

Con toda la información que va saliendo ahora solo nos resta esperar que, quienes están involucrados tengan un vestigio de dignidad y, por respeto a si mismo, pidan licencia en relación a sus cargos, cuando se dice que no hay nada oculto bajo el sol decimos verdad y exponemos la auténtica calidad moral de quienes se sientan en los puestos que ahora sabemos no fueron creados para ellos, esos que, a cambio de los famosos diezmos dan a obras que habrán de seguir enriqueciendo a los corruptos, ni modo amigos, éste es para nuestra desgracia el mundo que no tocó vivir, y con toda seguridad irán saliendo mucho más anomalías con el correr de los días, usted amable lector no se espante.

Este es el México en que nos tocó vivir, pero lo malo del asunto es que nadie hemos los mínimos esfuerzo para tratar de dejarle algo mejor a quienes vienen atrás de nosotros y que son, mañana, quienes habrán de juzgar a éstas generaciones que vamos saliendo.

Y por hoy de plano ya el paramos, en verdad que da asco todo lo se viene ventilando del quehacer político local, imagine usted cuando nos enteremos de los altos niveles de toda esa gran política, seguramente hasta creyentes en las oraciones habremos de terminar, y para parar le recordamos que nuestros siguen estando a sus ordenes para servirles: loyocruceropolitico@yahoo.com.mx y loyocrucero@hotmail.com